Era una pregunta retórica que me hacia un cliente hace poco. ¿Por que, si rechaza la ideología nazi, le encanta coleccionar medallas y condecoraciones del Tercer Reich?

Me llamo la atención y pensé que debíamos tener puntos en común ya que me ocurría lo mismo. Cuando compro medallas alemanas no pienso en política o ideologías, mas bien en la historia del objeto o en su belleza.

Entonces me pare a pensar que mas podríamos tener en común y se me ocurrió hacer la entrada al blog. Obviamente son valoraciones personales, seguramente un coleccionista de medallas británicas lo hace simplemente por el gusto de hacerlo sin mas.

Si creéis que hay mas motivos de los que iré hablando os animo a dejarlo en los comentarios.

Lo primero que llama la atención cuando uno echa un vistazo a estas condecoraciones el la belleza y el cuidado con el que se hacían. Una vez que el partido nazi llega al poder en 1933, crea una industria propagandista con las condecoraciones. Creando una red burocrática de leyes, códigos de fabricación y licencias controladas con el fin de motiva y alentar al pueblo alemán tras el revés sufrido durante la Primera Guerra Mundial.

De este modo crearon un gran abanico de condecoraciones para casi todo. Conmemorativas con la de la Anexión de los Sudetes (foto de la izda.), civiles, para funcionarios o militares como la Cruz de Hierro (foto de la derecha). Estas medallas se concedieron en un periodo muy concreto de la historia 1933-1945, siendo uno de los principales motivos.

Además de las medallas hay infinidad de variantes y fabricantes que favorecen su colección dando un juego increíble a la hora de coleccionar medallas del Tercer Reich.

Resaltar también que ningún ejercito tenia un catalogo tan amplio y variado como el alemán. Lo que era una especie de incentivo para la tropa el conseguir esas condecoraciones. Esto ha favorecido que hayan aparecido coleccionistas que solo se dedican a un rama por ejemplo de la Wehrmacth (Her, Kriegsmarine y Luftwaffe). Coleccionando exclusivamente esa rama del ejercito.

Asombra saber que la industria que producía estas medallas conservara hasta el final de la guerra la calidad de las mismas. Tanto en la finura como en los materiales. Si bien es cierto, que al finalizar el conflicto se fueron usando materiales mas a mano para la fabricación, pero sin bajar en la calidad del diseño. Esto es debido a que podían perder la licencia concedida por el estado para su fabricación.

La Segunda Guerra Mundial es un periodo de la historia que nos atrae al todo coleccionista de esta época. Y al igual que quien colecciona monedas o billetes, las medallas del Reich de los Mil años, cautiva. Obviamente hicieron bien su marketing.

Como curiosidad decir que un Corazon Púrpura entregado en la Segunda Guerra Mundial tiene el mismo diseño que el entregado en la Guerra de Vietnam, incluso en la actualidad son similares. Como he dicho, las medallas alemanas son irrepetibles. Sabemos que no se volverán a fabricar más y eso incita a su colección.

Un coleccionista puede ser tanto el investigador y estudioso de las mismas, como aquel que simplemente las tiene por su belleza. Detrás de todo esto decir que es simplemente un hobby.

Desde pequeño recuerdo que los Americanos eran los buenos y los Alemanes los malos. Según fui creciendo descubrí un mundo en las enciclopedias sobre las guerras mundiales. Hasta que llegas a un punto en el que quieres tocar las historia, ademas de conocerla. Y es cuando empieza la pasión por estudiar y tener estas piezas.

Y tu por que colecciones condecoraciones del Tercer Reich? Déjanos tu comentario.